20 jun 2018

María de Orozco, “La Malograda”




La época en la que vivió doña María de Orozco «la Malograda» hacia la segunda mitad del siglo XIV está determinada en unos años convulsos y de crisis profundas en asuntos económicos, demográficos y sociales tanto en el aspecto feudal como en el religioso. En el plano económico, la producción no alimentaba a una población que crecía considerablemente y la mala alimentación debido a las pésimas cosechas, hacía que enfermedades como la «Peste Negra» y otras, proliferaran sin control y por otra parte esta crisis económica creó conflictos sociales tanto en el campo como en la ciudad debido al levantamiento de los campesinos contra los señores feudales o de los obreros contra sus patronos en pueblos y ciudades. También en el ámbito político los reyes no lograban recuperar el poder que en otras épocas tuvieron y esto originó no pocas luchas con la nobleza en los distintos países europeos, asunto este que también lo podríamos aplicar al terreno religioso. Pues bien, este fue el periodo en el que vivió «la Malograda», conocida por este apodo por su prematura muerte cuando aún era muy joven, aunque otros biógrafos cuentan que murió con mas edad. Sin embargo esta leyenda urbana inspiró a Gustavo Adolfo Bécquer para escribir su Rima LXXVI:
De aquella muda y pálida mujer me acuerdo y digo:
¡Oh qué amor tan callado el de la muerte!
¡Qué sueño el del sepulcro, tan tranquilo!
Fue María una dama de alta cuna con varios títulos nobiliarios como los de señora de Escamilla y de Santa Olalla, hija de Íñigo López de Orozco y de Marina García de Meneses, tuvo tres maridos y de los tres enviudó y de ella descienden grandes personajes de la historia de España, tales como el cardenal Mendoza que era su nieto.
Contrajo primeras nupcias en 1374 con Martín Fernández de Guzmán (conde de Orgaz), quien le entregó como dote 20000 doblas castellanas de oro, tuvieron un hijo llamado Alvar Pérez de Guzmán que se convirtió en el heredero de los títulos. Muerto Martín Fernández, contrajo María un segundo matrimonio con Juan Rodríguez de Castañeda, que era viudo de Juana de Guzmán; era hija de este enlace Elvira de Castañeda que fue señora de Fuensalida por haber casado con don Pedro López de Ayala, personajes estos últimos que inspiraron a Bécquer para escribir su leyenda El Beso. Al morir su segundo marido Juan Rodríguez, María casó por tercera vez con Lorenzo Suárez de Figueroa, señor de Feria en Badajoz con quien tuvo tres hijos.
María de Orozco residió en Toledo en las casas pertenecientes a Suero-Téllez de Meneses y a María Meléndez que eran familia de su bisabuela materna que habían fundado a sus expensas el convento de Santa Clara la Real de Toledo el cual junto con otros antiguos monasterios como el de Santo Domingo el Real y el de las Capuchinas de Toledo, conforman en la actualidad la zona conocida como «conventual» o de los cobertizos.
Cuando murió María de Orozco, sus bienes y posesiones, se repartieron entre sus siete hijos, fruto de los tres matrimonios. Este reparto se hizo en Illescas el año 1399. Fue enterrada en la capilla del Hospital de Santiago de Toledo puesto que su último marido era maestre de la Orden; desaparecido este Hospital, sus restos se trasladaron a la capilla de Santiago del convento de San Pedro Mártir. Sin embargo Lorenzo Suárez de Figueroa decidió enterrarse en el monasterio de Santiago de la Espada que había sido fundado por él, pero al desaparecer dicho monasterio sus restos fueron trasladados a la capilla de la Universidad de Sevilla.Tras la desamortización de Mendizábal muchos conventos e instituciones desparecieron y San Pedro Mártir fue convertido de Museo Provincial y aquí fueron trasladados sepulcros de importantes personajes, entre ellos el de «la Malograda», sin embargo la idea de convertirlo en un panteón de «personajes ilustres» no cuajó, si bien aquí están enterrados Garcilaso de la Vega y su hijo Iñigo, don Pedro López de Ayala y doña Elvira de Castañeda -antes mencionados- y don Lope Gaitán y su esposa doña Guiomar de Meneses, fundadores del convento agustino de las ‘Gaitanas’, entre otros.
Al ser esposa de tres maridos y madre de siete hijos, María de Orozco «la Malograda» fue progenitora de muchos personajes, algunos muy principales como dije antes. Es imposible nombrarlos a todos, pero he querido dedicarle un capítulo aparte por haber vivido en Toledo y por estar relacionada con muchos ascendientes y descendientes que al ir emparentando con otras personalidades hicieron que esta señora no pueda ser obviada en la historia de nuestra ciudad.

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...