Existe una leyenda de amor que los locales asocian a la construcción de la Gran Muralla China y que está relacionada con aquellos que perecieron durante su construcción. Dicha leyenda cuenta la historia de una joven, llamada Meng Jiangnu, que conoció a un joven, Fan Xiliang. Él se ocultaba de los oficiales que reclutaban mano de obra para construir la muralla. Ambos se enamoraron y contrajeron matrimonio. Tan solo tres días después de la boda Fan fue reclutado para ayudar a los demás trabajadores.
Meng pasó un año sola, sin recibir noticias de su esposo. Después de tener una horrible pesadilla decidió ir en su busca. Cuando llegó a la muralla se enteró de que Xilian había muerto de cansancio y que estaba enterrado debajo del muro. Ella lloró tanto apoyada contra la muralla que una parte de ella colapsó y aparecieron los restos de los trabajadores muertos.
Meng se cortó sus dedos y observó cómo su sangre fluía a través de los esqueletos. Cuando esta se centró en torno a uno en particular, supo que había encontrado a su esposo. Hizo que lo enterraran apropiadamente y luego se suicidó lanzándose al mar.
No hay comentarios :
Publicar un comentario