La actriz falleció en 2009 con solo tenía 32 años. Una muerte que se debió a causas naturales pero de la que se habló muchísimo por las extraña circunstancias que la rodearon
Eran las ocho de la mañana del día 20 de diciembre de 2009. La madre de Brittany Murphy encontró a su hija inconsciente en el baño. Unos segundos después hacía una dramática llamada al 911, el teléfono de emergencias. Además de su madre en la casa se encontraba su marido, el guionista Simon Monjack. Los dos intentaron reanimarla y consiguieron que la actriz vomitara. Poco después llegaron los servicios médicos que la trasladaron inmediatamente al hospital donde ingresó ya cadáver. Pero ¿Qué es lo que había ocurrido? ¿Por qué una chica que, unos pocos días antes se paseaba sonriente por la alfombra roja presentando su última película había fallecido tan repentinamente?
Brittany Murphy nació en Atlanta, Georgia, el 10 de noviembre de 1977. Sus padres se divorciaron cuando ella tenía dos años de edad. Creció en Nueva Jersey y desde siempre quiso ser actriz. A los trece años ya estaba en Los Ángeles dispuesta abrirse camino. Salió en series de televisión como “Murphy Brown”, “Frazier” o “Blossom”. Su primer papel importante en el cine fue en “Fuera de onda” al lado de Alicia Silverstone. Luego la vimos junto a Michael Douglas en “Ni una palabra” y en “Inocencia interrumpida” con Angelina Jolie y Winona Ryder. En las dos, por cierto, interpretaba a chicas con problemas mentales.Pero lo suyo más que el drama era la comedia. Muchos comentaristas dijeron de ella que tenía algo de Goldie Hawn y otro poco de Meg Ryan. Algo que demostró en el film “Recién casados”, al lado de Ashton Kutcher con el que comenzó a salir. También la vimos en “Amor y otros desastres”, “Los amigos del novio” o junto al rapero Eminem en “8 millas” y mostró su faceta más sexy en “Sin City”. Estuvo a punto también de hacer de Janis Joplin en un biopic sobre esta artista, un film que, al final, no se pudo hacer por problemas con los derechos de las canciones de Janis. Y es que a la actriz también le gustaba cantar. Junto al Dj Paul Oakenfold tuvo un grupo llamado Blessed Soul.
Brittany Murphy no era muy alta, apenas un metro 60 centímetros y pesaba unos cuarenta y ocho kilos. En algunas épocas de su vida estaba extremadamente delgada. Los medios sensacionalistas hablaban de anorexia o de consumo de cocaína, algo que ella negó siempre con rotundidad. Su relación con Ashton Kutcher terminó y en mayo de 2007 se casó con el guionista, director y productor Simon Monjack. Los últimos tres años y medio de su vida los viviría en su casa de Beverly Hills, una mansión que antes habían sido habitada por Justin Timberlake y Britney Spears y que para algunos se convertiría en protagonista de su muerte. Según informaron varios medios Brittany Murphy sufría un fuerte catarro pocos días antes de morir. La actriz tomó una serie de medicamentos para combatirlo pero estaba demasiado débil debido a dolores menstruales, un principio de anemia y de neumonía. La combinación de los fármacos, unida a su debilidad, fue la causa, según la autopsia oficial, de su fallecimiento.
Sin embargo, poco después de morir, comenzaron a difundirse otras teorías. La primera era que el estado de cansancio y agotamiento de la actriz se debía al estrés. No solamente por su trabajo sino por su situación familiar. Su madre había superado un cáncer de mama y su marido sufría convulsiones e incluso había tenido un infarto. Brittany tomaba diversos medicamentos para soportar todas esas presiones. Además Simon Monjack, su marido, hizo unas declaraciones acusando a los estudios cinematográficos de ser en parte los causantes de la muerte de su mujer. Dos semanas antes de su fallecimiento, prescindieron de ella para doblar la segunda parte de la película de animación “Happy Feet El padre de Brittany, que había estado ausente de su vida durante años, también lanzó otras rocambolescas hipótesis. La primera era que su hija había sido asesinada por el Gobierno de los Estados Unidos. Dijo que Brittany estaba siendo vigilada por su apoyo a una mujer llamada Julia Davis, una funcionaria del Departamento de Seguridad que había denunciado sobornos a autoridades de la aduana para que permitieran el paso de terroristas. En mayo de 2010, cuando apenas había pasado medio año de la muerte de Brittany, Simon Monjack, su marido, fue hallado muerto en su domicilio. Fue la madre de Brittany, Sharon Murphy, quien encontró a Monjack inconsciente en el dormitorio principal de la vivienda, muy cerca del cuarto de baño donde se desplomó mortalmente Brittany. Los resultados de la autopsia determinaron que Monjack falleció de neumonía y por una anemia severa. Es decir, prácticamente igual que su esposa. La policía realizó una exhaustiva inspección del hogar que había compartido la pareja. Se pensaba que el moho de la ducha podría haber sido la causa de las dos muertes. Sin embargo, Sharon Murphy, la madre de Brittany, que vivía en la misma mansión no había sido infectada. Además Simon Monjack, cuando aún estaba vivo, pidió que analizaran su domicilio. Se encontraron algunas deficiencias, pero el informe final decía que no había ningún problema nocivo.
Fue entonces cuando las sospechas recayeron en la madre de Brittany. ¿Había tenido ella algo que ver en las dos muertes? Recordemos que vivía en la misma casa y que continuaba viviendo allí incluso después del fallecimiento de su hija. Pero nada delictivo pudo demostrarse. Las muertes de Brittany Murphy y de su marido siguen envueltas en el misterio y en la sospecha aunque oficialmente se debieron a causas naturales.
Brittany Murphy nació en Atlanta, Georgia, el 10 de noviembre de 1977. Sus padres se divorciaron cuando ella tenía dos años de edad. Creció en Nueva Jersey y desde siempre quiso ser actriz. A los trece años ya estaba en Los Ángeles dispuesta abrirse camino. Salió en series de televisión como “Murphy Brown”, “Frazier” o “Blossom”. Su primer papel importante en el cine fue en “Fuera de onda” al lado de Alicia Silverstone. Luego la vimos junto a Michael Douglas en “Ni una palabra” y en “Inocencia interrumpida” con Angelina Jolie y Winona Ryder. En las dos, por cierto, interpretaba a chicas con problemas mentales.Pero lo suyo más que el drama era la comedia. Muchos comentaristas dijeron de ella que tenía algo de Goldie Hawn y otro poco de Meg Ryan. Algo que demostró en el film “Recién casados”, al lado de Ashton Kutcher con el que comenzó a salir. También la vimos en “Amor y otros desastres”, “Los amigos del novio” o junto al rapero Eminem en “8 millas” y mostró su faceta más sexy en “Sin City”. Estuvo a punto también de hacer de Janis Joplin en un biopic sobre esta artista, un film que, al final, no se pudo hacer por problemas con los derechos de las canciones de Janis. Y es que a la actriz también le gustaba cantar. Junto al Dj Paul Oakenfold tuvo un grupo llamado Blessed Soul.
Brittany Murphy no era muy alta, apenas un metro 60 centímetros y pesaba unos cuarenta y ocho kilos. En algunas épocas de su vida estaba extremadamente delgada. Los medios sensacionalistas hablaban de anorexia o de consumo de cocaína, algo que ella negó siempre con rotundidad. Su relación con Ashton Kutcher terminó y en mayo de 2007 se casó con el guionista, director y productor Simon Monjack. Los últimos tres años y medio de su vida los viviría en su casa de Beverly Hills, una mansión que antes habían sido habitada por Justin Timberlake y Britney Spears y que para algunos se convertiría en protagonista de su muerte. Según informaron varios medios Brittany Murphy sufría un fuerte catarro pocos días antes de morir. La actriz tomó una serie de medicamentos para combatirlo pero estaba demasiado débil debido a dolores menstruales, un principio de anemia y de neumonía. La combinación de los fármacos, unida a su debilidad, fue la causa, según la autopsia oficial, de su fallecimiento.
Sin embargo, poco después de morir, comenzaron a difundirse otras teorías. La primera era que el estado de cansancio y agotamiento de la actriz se debía al estrés. No solamente por su trabajo sino por su situación familiar. Su madre había superado un cáncer de mama y su marido sufría convulsiones e incluso había tenido un infarto. Brittany tomaba diversos medicamentos para soportar todas esas presiones. Además Simon Monjack, su marido, hizo unas declaraciones acusando a los estudios cinematográficos de ser en parte los causantes de la muerte de su mujer. Dos semanas antes de su fallecimiento, prescindieron de ella para doblar la segunda parte de la película de animación “Happy Feet El padre de Brittany, que había estado ausente de su vida durante años, también lanzó otras rocambolescas hipótesis. La primera era que su hija había sido asesinada por el Gobierno de los Estados Unidos. Dijo que Brittany estaba siendo vigilada por su apoyo a una mujer llamada Julia Davis, una funcionaria del Departamento de Seguridad que había denunciado sobornos a autoridades de la aduana para que permitieran el paso de terroristas. En mayo de 2010, cuando apenas había pasado medio año de la muerte de Brittany, Simon Monjack, su marido, fue hallado muerto en su domicilio. Fue la madre de Brittany, Sharon Murphy, quien encontró a Monjack inconsciente en el dormitorio principal de la vivienda, muy cerca del cuarto de baño donde se desplomó mortalmente Brittany. Los resultados de la autopsia determinaron que Monjack falleció de neumonía y por una anemia severa. Es decir, prácticamente igual que su esposa. La policía realizó una exhaustiva inspección del hogar que había compartido la pareja. Se pensaba que el moho de la ducha podría haber sido la causa de las dos muertes. Sin embargo, Sharon Murphy, la madre de Brittany, que vivía en la misma mansión no había sido infectada. Además Simon Monjack, cuando aún estaba vivo, pidió que analizaran su domicilio. Se encontraron algunas deficiencias, pero el informe final decía que no había ningún problema nocivo.
Fue entonces cuando las sospechas recayeron en la madre de Brittany. ¿Había tenido ella algo que ver en las dos muertes? Recordemos que vivía en la misma casa y que continuaba viviendo allí incluso después del fallecimiento de su hija. Pero nada delictivo pudo demostrarse. Las muertes de Brittany Murphy y de su marido siguen envueltas en el misterio y en la sospecha aunque oficialmente se debieron a causas naturales.
No hay comentarios :
Publicar un comentario