Uno de los pueblos míticos de la despoblación en España, , pueblo relativamente grande y con un excelente estado de conservación de sus edificaciones. Resulta sorprendente pasear por sus calles y no encontrar un alma, parece como si sus vecinos hubieran ido a realizar alguna faena y fueran a regresar a casa de un momento a otro.
El lugar te envuelve con su belleza silenciosa y es de lo más bonito que el visitante se pueda encontrar.
Algo más de 55 viviendas componían el pueblo. Casas de buena construcción y algunas de gran tamaño.
Situado en una paramera al borde de una hondonada del terreno. Sus campos se sembraban principalmente de trigo, cebada y yeros. En la ganadería era la oveja lo que más abundaba, pero los castrillanos fueron conocidos también por tener una importante cantidad de ganado mular. Cada vecino tenia varias mulas y las más pequeñas que aun no trabajaban eran llevadas a apacentar por un muletero.
La fiesta principal del pueblo se hacia en septiembre en fecha acordada cuando se hubieran terminado las faenas del campo y procurando que no coincidiera con ninguna de otros pueblos. Duraban dos días y solía ir algún acordeonista de ña zona. Por la mañana se hacia una ronda antes de la misa por parte de los músicos por las calles del pueblo, después una misa y una procesión llevando a la virgen hasta la ermita. Se hacia un pequeño baile hasta la hora de comer. Por la tarde se rezaba el rosario, quedando para el final el baile principal.
Se acostumbraba a hacer una comida un poco especial para todos los familiares que venían de fuera y se preparaban sopas de fideos y paella con conejo o pollo.
Tenían otros días festivos como el 7 de agosto, día de los Mártires de Cardeña.
El día 11 de junio celebraban a San Bernabé.El día 15 de mayo celebraban a San Isidro. Se hacia una misa y se iba en procesión a la salida del pueblo donde el cura bendecía los campos.
El cura acudía cada dos domingos a celebrar misa, había que ir a buscarle con una mula, también venia el cartero a pie dos veces por semana a recoger la correspondencia y luego la repartía.
Si había maestra residente que se hospedaba en alguna casa del pueblo.
El medico había que ir a avisarle si había alguna enfermedad grave, esperar a que el medico hiciese la visita para comprar las medicinas que hubiera recetado y volver al pueblo.
Aparecía el panadero o el pescadero primero en una bicicleta y luego en una moto, los leñeros también aparecían por allí para vender leña de la que andaban escasos debido a la falta de arbolado en su termino.
El grano transportado en carros lo llevaban a moler a los molinos.
La luz eléctrica y la carretera llegaron en los años 50 al pueblo y fue todo un acontecimiento, pero pese a estas mejoras no fue obstáculo para que fueran tomando el camino de la emigración, y una de las causas principales fue la falta de agua, tenían dos fuentes por debajo del pueblo pero no eran buenas para beber ni para lavar la ropa, solo era apta para los animales, además del sacrificio que suponía subirlas hasta el pueblo por un camino muy empinado e impracticable en los meses de invierno, por lo que tuvieron que recurrir a los tinajeros adonde conducían el agua de lluvia debidamente canalizada de los tejados para almacenar agua para beber Con la paradoja de que se construyo una fuente con agua potable cuando ya solo quedaba un vecino viviendo en el pueblo. Así que el problema del agua añadido a la marcha de la gente joven hacia las capitales fue acelerando el proceso de despoblación en el pueblo. Ya no llegaban a media docena de vecinos. Varias personas mayores habían fallecido y otras se fueron con sus hijos. La taberna ya no la alquilaba nadie y los vendedores de fuera dejaron de llegar. Todos fueron vendiendo el ganado, tanto las ovejas como las mulas. Otros vendieron las fincas. Se hizo la parcelaria agrícola y las fincas se hicieron mucho más grandes. Algunos vecinos compraron tractores, se fueron a otros pueblos o ciudades más grandes y desde allí llegaban a hacer las faenas del campo. Para recoger las cosechas empezaron a llegar cosechadoras.Cada vez era más difícil estar allí, sobre todo para los que no tenían coche.En el año 1975 llegó el momento en el que sólo quedó una persona. Esta persona era un señor que estaba acostumbrado a vivir en el campo, con sus dos perros, su escopeta de caza y sus gallinas, estaba soltero y no tenía ni pedía, cuentas a nadie. Sus hermanos quisieron llevarle con ellos, pero el prefirió quedarse y vivir a su aire. Le dejaron la casa de la taberna en la cual estaba el teléfono y alguien le regaló una radio, para que no se sintiera tan solo este hombre era Florentino Gonzalez que vivió solo durante 19 años hasta el año 1994 en que unos cazadores lo encontraron recién muerto en su casa con la comida hirviendo todavía en el puchero, poniéndose fin así al ciclo de vida. A partir de aquí llegó el saqueo de las casas y la iglesia, un expolio que fue brutal según sus antiguos vecinos. Un mal endémico que ha azotado a todos los despoblados desde los años 60 que empezó la emigración masiva, cuando un pueblo se quedaba vacío (e incluso con algunos vecinos todavía viviendo) al día siguiente los amigos de lo ajeno ya estaban abriendo todas las casas en busca de antigüedades, muebles, herramientas y adornos de valor.
Actualmente el pueblo es frecuentado por los agricultores que trabajan las tierras y por los cazadores en temporada. Desde hace unos años se celebra el ultimo sábado de agosto la fiesta en donde vuelven por un día los que se fueron y sus descendientes. Se monta una carpa, se realiza una misa y una procesión, para continuar con un pequeño baile y una comida de hermandad
El lugar te envuelve con su belleza silenciosa y es de lo más bonito que el visitante se pueda encontrar.
Algo más de 55 viviendas componían el pueblo. Casas de buena construcción y algunas de gran tamaño.
Situado en una paramera al borde de una hondonada del terreno. Sus campos se sembraban principalmente de trigo, cebada y yeros. En la ganadería era la oveja lo que más abundaba, pero los castrillanos fueron conocidos también por tener una importante cantidad de ganado mular. Cada vecino tenia varias mulas y las más pequeñas que aun no trabajaban eran llevadas a apacentar por un muletero.
La fiesta principal del pueblo se hacia en septiembre en fecha acordada cuando se hubieran terminado las faenas del campo y procurando que no coincidiera con ninguna de otros pueblos. Duraban dos días y solía ir algún acordeonista de ña zona. Por la mañana se hacia una ronda antes de la misa por parte de los músicos por las calles del pueblo, después una misa y una procesión llevando a la virgen hasta la ermita. Se hacia un pequeño baile hasta la hora de comer. Por la tarde se rezaba el rosario, quedando para el final el baile principal.
Se acostumbraba a hacer una comida un poco especial para todos los familiares que venían de fuera y se preparaban sopas de fideos y paella con conejo o pollo.
Tenían otros días festivos como el 7 de agosto, día de los Mártires de Cardeña.
El día 11 de junio celebraban a San Bernabé.El día 15 de mayo celebraban a San Isidro. Se hacia una misa y se iba en procesión a la salida del pueblo donde el cura bendecía los campos.
El cura acudía cada dos domingos a celebrar misa, había que ir a buscarle con una mula, también venia el cartero a pie dos veces por semana a recoger la correspondencia y luego la repartía.
Si había maestra residente que se hospedaba en alguna casa del pueblo.
El medico había que ir a avisarle si había alguna enfermedad grave, esperar a que el medico hiciese la visita para comprar las medicinas que hubiera recetado y volver al pueblo.
Aparecía el panadero o el pescadero primero en una bicicleta y luego en una moto, los leñeros también aparecían por allí para vender leña de la que andaban escasos debido a la falta de arbolado en su termino.
El grano transportado en carros lo llevaban a moler a los molinos.
La luz eléctrica y la carretera llegaron en los años 50 al pueblo y fue todo un acontecimiento, pero pese a estas mejoras no fue obstáculo para que fueran tomando el camino de la emigración, y una de las causas principales fue la falta de agua, tenían dos fuentes por debajo del pueblo pero no eran buenas para beber ni para lavar la ropa, solo era apta para los animales, además del sacrificio que suponía subirlas hasta el pueblo por un camino muy empinado e impracticable en los meses de invierno, por lo que tuvieron que recurrir a los tinajeros adonde conducían el agua de lluvia debidamente canalizada de los tejados para almacenar agua para beber Con la paradoja de que se construyo una fuente con agua potable cuando ya solo quedaba un vecino viviendo en el pueblo. Así que el problema del agua añadido a la marcha de la gente joven hacia las capitales fue acelerando el proceso de despoblación en el pueblo. Ya no llegaban a media docena de vecinos. Varias personas mayores habían fallecido y otras se fueron con sus hijos. La taberna ya no la alquilaba nadie y los vendedores de fuera dejaron de llegar. Todos fueron vendiendo el ganado, tanto las ovejas como las mulas. Otros vendieron las fincas. Se hizo la parcelaria agrícola y las fincas se hicieron mucho más grandes. Algunos vecinos compraron tractores, se fueron a otros pueblos o ciudades más grandes y desde allí llegaban a hacer las faenas del campo. Para recoger las cosechas empezaron a llegar cosechadoras.Cada vez era más difícil estar allí, sobre todo para los que no tenían coche.En el año 1975 llegó el momento en el que sólo quedó una persona. Esta persona era un señor que estaba acostumbrado a vivir en el campo, con sus dos perros, su escopeta de caza y sus gallinas, estaba soltero y no tenía ni pedía, cuentas a nadie. Sus hermanos quisieron llevarle con ellos, pero el prefirió quedarse y vivir a su aire. Le dejaron la casa de la taberna en la cual estaba el teléfono y alguien le regaló una radio, para que no se sintiera tan solo este hombre era Florentino Gonzalez que vivió solo durante 19 años hasta el año 1994 en que unos cazadores lo encontraron recién muerto en su casa con la comida hirviendo todavía en el puchero, poniéndose fin así al ciclo de vida. A partir de aquí llegó el saqueo de las casas y la iglesia, un expolio que fue brutal según sus antiguos vecinos. Un mal endémico que ha azotado a todos los despoblados desde los años 60 que empezó la emigración masiva, cuando un pueblo se quedaba vacío (e incluso con algunos vecinos todavía viviendo) al día siguiente los amigos de lo ajeno ya estaban abriendo todas las casas en busca de antigüedades, muebles, herramientas y adornos de valor.
Actualmente el pueblo es frecuentado por los agricultores que trabajan las tierras y por los cazadores en temporada. Desde hace unos años se celebra el ultimo sábado de agosto la fiesta en donde vuelven por un día los que se fueron y sus descendientes. Se monta una carpa, se realiza una misa y una procesión, para continuar con un pequeño baile y una comida de hermandad
DERECHOS DE AUTOR CUANDO SE REGISTRA EN INTERNT HAY IMFORMACION YO LA TOMO PARA INFORMAR CATETO ANONIMO!!!!!
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