Castillo de Guadalerzas

Su estructura se basa en un cuerpo central, que es la torre del homenaje, alrededor de la cual hay cuatro lienzos de muralla rematados en almenas, con cuatro cubos semicirculares en los ángulos.
Anejos a las fortificaciones se encuentran aún los restos de corrales y dependencias auxiliares y, dentro del recinto, en una esquina entre la torre del homenaje y uno de los cubos, se pueden ver los restos de una capilla construida en 1769.
Actualmente está pendiente de restauración.
Propiedad privada. No visitable.
Encuentra su origen en la intención de Alfonso VIII en crear en este punto un albergue y hospedería para los caballeros de las Órdenes Militares de Calatrava y Santiago, sobre lo que fuera primero un asentamiento árabe. Se le denomina castillo-hospital de Las Guadalerzas.
Perteneció a la Orden de San Juan de Jerusalén, y Felipe II lo cedió al Colegio de Doncellas Nobles de Toledo, pasando finalmente a ser residencia señorial de la casa del Marquesado de Las Guadalerzas, de donde toma su nombre actual. En la Guerra de la Independencia sirvió de reducto militar.
Fortaleza construida en el siglo XII y restaurada en los siglos XV y XVI.
La otra construcción interesante en este valle es un puente de la misma época que el Castillo, compuesto por 6 ojos de diferentes tamaños, de arcos de medio punto, rebajados con boquillas de ladrillo y tímpanos de mampostería